El medio ambiente y el estilo de vida

En el complejo orden y equilibrio naturales, el hombre irrumpe alegremente alterándolo y modificándolo a su antojo, sin pensar en ningún instante en las consecuencias.
CMV
Definitivamente, el desarrollo de la humanidad ha traído serias consecuencias en nuestro estilo de vida, aunado a muchos factores que involucra, desarrollo tecnológico, política, progreso, industrialización, nacimiento de necesidades artificiales, y desde luego, contaminación, deterioramiento y contaminación del medio ambiente.
En el caso de Venezuela, el escenario se presenta turbulento, con hechos que muestran conflictos económicos, políticos, que ha incidido determinante en el comportamiento social, educacional, en la seguridad, salud y calidad de vida del venezolano.
El actual gobierno debe preocuparse más por la educación, la cultura, salud, calidad de vida del venezolano que por décadas ha sido abandonado, debe organizarse de tal forma que evite que se siga manifestando la corrupción, hechos que han afectado seriamente la calidad de vida, el estilo del venezolano, hasta el extremo, que hoy se vive en un entorno en donde la violencia predomina, la inseguridad no es controlada, la salud deteriorada, la contaminación se manifiesta sin mecanismos de control adecuados afectando las aguas, aire, tierra , salud.
El Gobierno debe tomar muy en cuenta cómo enfrentar el crecimiento demográfico, el número de viviendas necesarias para miles de personas que viven en condiciones inhumanas no aptas para garantizar salud. Enfrentar la pobreza no con subsidios mensuales, sino creando empleo, utilizando la mano de obra desocupada que le ha dado paso incontrolable a una economía informal que cada vez más se incrementa.
Lo cierto, que ante esta realidad, este reto, caben una serie de preguntas tales como: ¿De qué manera nos está afectando la contaminación? ¿Cómo se está deteriorando la salud? ¿Cuál ha sido el precio de la degradación del ambiente?
Lo cierto, que es asombroso observar como hemos ido tolerando situaciones ante la invasión de la contaminación y sus efectos en nuestro corto tránsito por esta vida. Se ha preguntado por ejemplo ¿En que playa de Venezuela, en cualquiera que haya mar, puede comer pescado con seguridad de que no está contaminado, que no sea propicio para el cólera, que no tenga mercurio, ácido nítrico, plomo o excremento humano?¿Qué esta haciendo el estado al respecto? Cuáles son las precauciones que se han tomado?..
Por otra parte, se sigue con la preocupación, qué es lo que se está haciendo realmente de evitar la seria contaminación atmosférica en caracas, Valencia; Maracaibo, Anzoátegui, Nueva esparta por ejemplo, así con respecto al ruido, contaminación del agua, aglomeración considerable de menores, la vida insegura en los barrios, apremio y tensión a las personas, la inseguridad, el tráfico de drogas
Todo nos indica que se ha descuidado los cambios, la planificación rural, el medio ambiente, afectando el estilo de vida que se torna cada vez más inhumano y menos conectado con su entorno natural, menos preocupación por todo aquello que afecte a la comunidad, a sus habitantes, todo lo que es esencial para vivir en armonía y paz con nosotros mismos.
No nos extrañe para el caso concreto de Carabobo, especialmente valencia, que cualquier persona que pase ocasionalmente sentirá diversas molestias respiratorias, dolores de cabeza, irritación por el ruido y el hacinamiento de personas y vehículos, grandes colas, estrés, tensión, fatiga.
No olvidemos que se trata de una ciudad industrial, no obstante sus aguas y aires están contaminados, de ahí la proliferación de enfermedades , al respecto caben las preguntas¿Cumplen los organismos del estado, la Gobernación, la Alcaldía en vigilar la contaminación del entorno, de qué se cumpla con la ley penal del ambiente?
Tome en cuenta, que hoy la ciencia no cuestiona que la presencia del anhídrido sulfuroso en la atmósfera genera fenómeno de lluvias acidas, con efectos conocidos para la vida vegetal, animal y humana. El anhídrido sulfuroso y el material particulado son altamente nocivos para la salud de la población, puesto corresponde a gases y partículas respirables y de absorción vía piel, generadoras de enfermedades respiratorias, cáncer y otros asociados, matando a la persona. El material particulado por su parte, produce irritación en las vías respiratorias, problemas bronquiales, dolores de cabeza e irritación de las mucosas, conjuntivitis, irritabilidad y fatiga. Todos síntomas que se tornen más graves es caso de asmáticos, ancianos y lactantes. Dependiendo del contenido puede generar cáncer y graves trastornos del sistema nervioso y del estado anímico
Por otra parte, la cantidad de monóxido que se respira como lo cita Alejandro Celis. Es proporcional a la gravedad de las enfermedades respiratorias. A mayor cantidad se produce un daño que conduce a bronquitis obstructivas y que favorece la aparición de bronconeumonía en los días posteriores a la exposición. En caso de haber humedad en el aire, se produce acido sulfúrico que agrava las enfermedades anteriores y favorece la muerte prematura de personas previamente enfermas. Todo ello se puede estadísticamente- si existe un buen control-recolectar información en los hospitales y clínicas y estudiar su comportamiento, crecimiento y las acciones correctivas al respecto.
Ahora bien ¿Que esta sucediendo con respecto al arsénico?, puesto a igual que el plomo y el mercurio dispara el cáncer y es acumulativo. Produce malformaciones durante el embarazo y aumenta la probabilidad de mortalidad infantil (cono el conocido caso del Palito en Falcón que generó graves problemas de contaminación de mercurio en muchas mujeres y sus hijos)
Recordemos lo que una vez dijo el expresidente chileno Patricio Aylwin, que la contaminación no solo afecta al aire, los ríos y los bosques, sino que también a las almas. Una sociedad poseída por el frenesí de producir más para consumir más, tiende a convertir las ideas, los sentimientos, el arte, el amor, la amistad y hasta las mismas personas, en objetos de consumo. Ninguna sociedad había producido tanto deshechos como la nuestra: desechos materiales y deshechos morales.